ESENDOM

Cultura y conciencia

Abinader en la ONU: diplomacia internacional con olor a alga (Sátira)

Sátira, HumorEMMANUEL ESPINALComment

Por Esendom
1 de octubre de 2025

Nueva York, Naciones Unidas - Luis Abinader regresó al podio de la 80ª Asamblea General con su estilo característico: mitad catedrático de macroeconomía dando clase a las 9 PM, mitad coach inspiracional de esos que hablan frente al mar Caribe. Entre "Sus Excelencias" para acá y referencias a Franklin D. Roosevelt para allá, la audiencia diplomática se ajustaba los auriculares como preparándose para un seminario llamado: "El arte de hablar bonito sin soltar el tema doméstico."

El arranque épico (con reparto internacional)

El mandatario comenzó navegando entre ruinas de conflictos antiguos, la Carta de San Francisco y un "orden mundial más equitativo" que sonó a eslogan de campaña planetaria: que los millonarios aflojaran la cartera, pero que siguieran poniendo plata en hoteles con brazalete todo incluido. Aplausos medidos. Fotos mentales. El encargado de redes del Palacio ya tenía listo el texto: "Unidos somos mejores. 80 años construyendo paz, progreso y dignidad"—hashtag obligatorio: #MultilatalismoConCobertura5G.

El pentágono de las preocupaciones

Abinader desglosó su ranking de angustias globales: división política, barreras al comercio, tsunami tecnológico, emergencia climática y pugna entre potencias. La ONU respondió con cara de "ajá, ahora cuentáme uno de Pepito", mientras en X (el antiguo Twitter) alguien tecleaba si ese tsunami tecnológico traía consigo el truco para abaratar el arroz sin declarar la guerra con los que lo traen de afuera.

Entre mercados que tiemblan y materias primas con los nervios de punta, surgió el supervillano del Caribe: el sargazo. Si Marvel anda buscando némesis para su próximo saga, que se forme: esta alga devora costas, amenaza la salud colectiva y—peor aún—arruina las sesiones fotográficas aéreas de recién casados en Punta Cana y algo que amenaza el marketing de David ‘Drupi’ Collado (perdón al AntiNoti por el uso del apodo) Ministro de Turis

Roosevelt hace aparición especial y la ONU va al psicólogo

El presidente invocó a Roosevelt: paz amarrada a justicia social y económica. Roosevelt, desde su busto hipotético, arqueó las cejas con escepticismo. Abinader aprovechó el momentum para plantear ONU80 como rehabilitación organizacional: menos protocolo vacío, más logros tangibles; menos nostalgia sepia, más hojas de cálculo con indicadores de rendimiento. "Si no renovamos la ONU, se volverá obsoleta", advirtió, y un diplomático bostezó en código formal: se acomodó el nudo de la corbata.

Entre líneas, soltó una granada de relaciones públicas: llegó la hora de que una mujer lidere la Secretaría General. Se escuchó el tecleo de mil columnas de opinión auto-generándose. Las oficinas de relaciones exteriores hicieron matemática rápida: cuotas de género, sesiones de fotos y foros tipo "Mujeres Liderando lo Global".

Objetivos globales: marcador electrónico estilo estadio

A media década de 2030, Abinader mostró las cifras:

Pobreza moderada: bajó de 25.8% (2019) a 18.05% (primer trimestre 2025).

Hambre: cayó de 8.6% (2018) a 3.6% (2025).

El contador oficial de la ONU hizo un gesto de aprobación digital. La gente común pensó en la comida del día y en ese salario "aumentado"—término que luce espectacular en presentaciones pero que en la tienda de la esquina no relumbra tanto. El presidente solicitó una nueva arquitectura financiera planetaria: menos papeleo, más préstamos blandos, perdón de deudas y fórmulas "creativas" (léase: "que la plata llegue antes de que el sancocho se pudra").

Haití, el episodio recurrente

Llegamos al segmento convertido en serie de televisión: Haití. Abinader repitió su discurso de 2021: intervención global coordinada o desastre expandido. Celebró la Misión de Seguridad Multinacional (MSM), agradeció a Kenia, Jamaica, Belice, Bahamas, Guatemala y El Salvador, y advirtió: el mandato vence el 2 de octubre.

Traducción para el público local: "Muchachos, si Amazon no me entrega esto el miércoles, cancelo el pedido."

Propuso convertir la MSM en algo con liderazgo sólido, objetivos concretos y supervisión onusiana—con protocolos claros, vigilancia estricta y transparencia en derechos humanos. Instó a los miembros permanentes del Consejo a decidir sin dilaciones, como si aquello fuera una reunión municipal y no el club de los vetos elegantes. Finalizó el tema con su himno territorial: República Dominicana defenderá sus fronteras. Ovación de cortesía en la sección de "totalmente de acuerdo, pero envíenme el documento por correo".

Justicia ambiental, edición "Caribe sin filtro"

Para las naciones insulares pequeñas, la triple amenaza—clima, especies, polución—no es poesía: es el agua salada colándose en el jardín. Exigió acceso a fondos y transferencia de tecnología (sí, favor de traer aspiradoras que absorban sargazo como si fuera fideo). Mencionó el avance hacia la aprobación del Tratado BBNJ (protección de océanos lejanos): proteger el mar como si fuera el refrigerador compartido—si todos sacan cosas sin avisar, mañana está vacío.

El cierre hollywoodense

Concluyó con retórica de torre de vigilancia y navegación: la ONU no puede ser simple testigo de catástrofes; tiene que orientar. Cooperación global, respeto humano, avance compartido, y un planisferio que no esté diseñado "para la élite exclusivamente". Que la paz deje de ser deseo y se convierta en acción. Acordes de violines. Pantalla en negro. Los intérpretes cerraron el audio con precisión de especialistas quirúrgicos.

Apuntes marginales (edición ESENDOM)

Cooperación Premium: Viene con cita de FDR, estrategia anti-algas y selfie con Guterres. No incluye arreglo instantáneo para el tráfico en la autopista.

Líder femenina en la ONU: Excelente propuesta. Ahora, por favor, también póngalas en los presupuestos, no solamente en los conversatorios.

Metas con picante: Si el Excel marca 18.05%, que la bodega registre al menos 18.05% menos de deuda pendiente.

MSM "ya o nunca": Si la operación es fuerte, que sea fuerte en logros y ligera en trámites.

Universo Cinematográfico del Sargazo: Próxima entrega: "BBNJ contra la Invasión Marrón".

Veredicto ESENDOM

Abinader llevó a la ONU un menú ejecutivo: política fronteriza, maquillaje multilateral y estadísticas de desarrollo con acabado neón. Hubo propuestas válidas y gestos diplomáticos, todo bañado en la ironía característica: pronunciar "transformación" en Nueva York es sencillo; hacerla realidad en el Caribe, con algas hasta las rodillas y presupuesto ajustado, eso sí es gobernar de verdad.