Jeik Anilus Lusi y Elvis Borquez Castillo
Por El Notibocina
9 de septiembre de 2025
El Notibocina Investiga: Historias sin resolver que exigen una segunda mirada
Puntos clave:
Dos adolescentes, Jeik Anilus Lusi (haitiano-dominicano) y Elvis Borquez Castillo (dominicano), fueron hallados muertos en el tren de aterrizaje de un avión de JetBlue en Florida.
Ambos murieron por asfixia tras esconderse en el compartimiento del tren de aterrizaje del Airbus A320.
El avión partió desde Puerto Plata, pasó por Nueva York, Jamaica y Utah antes de llegar a Fort Lauderdale, donde fueron hallados los cuerpos el 7 de enero de 2025.
Sus madres los identificaron mediante fotos y muestras de ADN entregadas a las autoridades.
Aún no se ha aclarado cómo lograron entrar a la aeronave ni cómo pasaron desapercibidos durante tantos vuelos.
🛬 ¿Quién se sube a un avión escondido en su tren de aterrizaje?
Parece una pregunta absurda, pero es una tragedia real. El 7 de enero de 2025, técnicos de mantenimiento de JetBlue hicieron un hallazgo espeluznante en el Aeropuerto Internacional de Fort Lauderdale-Hollywood: dos cuerpos en el tren de aterrizaje del vuelo 1801. No era parte de un thriller de Netflix ni de un capítulo de Narcos. Eran dos jóvenes reales: Elvis Borquez Castillo, de solo 16 años, y Jeik Anilus Lusi, cuya edad no fue oficialmente revelada pero también era menor de edad.
Ambos partieron, presuntamente, desde Puerto Plata en República Dominicana el 5 de enero. Tres días y más de 6 vuelos después, sus cuerpos sin vida fueron descubiertos. Según las autoridades médicas del Condado de Broward, la causa de muerte fue asfixia por falta de oxígeno, agravada por temperaturas gélidas en ese compartimiento mortal que puede llegar a los -40°C.
🔍 ¿Cómo lograron abordar el avión sin ser vistos?
Esa es la pregunta que nadie parece poder —o querer— responder. ¿Dónde estaban los controles de seguridad? ¿Qué tan fácil es colarse en un avión comercial?
La explicación más obvia es que abordaron en República Dominicana. Hubo una falla de seguridad en el aeropuerto Gregorio Luperón.
Mary Schiavo, ex inspectora general del Departamento de Transporte, reveló que la Administración Federal de Aviación (FAA) ha registrado 128 casos a nivel mundial desde 1947 hasta 2020. Más del 75% de esos intentos terminaron en muerte debido a los peligros extremos del compartimento de las ruedas, incluyendo hipotermia, privación de oxígeno, y el riesgo de ser aplastado por los mecanismos del tren de aterrizaje. Compartió, «El hecho de que esto siga ocurriendo es una violación grave de la seguridad de la aviación».
Aquí surge otra duda más espinosa: si el TSA estadounidense supervisa la seguridad de los aeropuertos extranjeros con vuelos hacia EE.UU., ¿cómo se le escaparon dos adolescentes que se metieron en la parte más riesgosa del avión?
📸 ¿Quiénes eran Jeik y Elvis?
No eran criminales. No eran terroristas. Eran jóvenes con sueños, desesperación y, probablemente, con muy pocas opciones. Elvis fue reportado como desaparecido el 4 de enero por su madre, Ironelis Castillo, en Bávaro. Según contó a NBC6, un vecino lo llevó a un aeropuerto cercano ese día. No lo volvió a ver.
Jeik, de raíces haitianas, fue identificado por su madre, Margarita Luisi Elisma, también en República Dominicana. Ambas madres se reunieron con agentes del Sheriff del Condado de Broward, quienes viajaron al país caribeño para concluir la investigación y obtener muestras de ADN.
✈️ ¿Qué responsabilidad tienen JetBlue y el aeropuerto?
Las aerolíneas tienen protocolos de inspección. Pero como explicó un expiloto de Airbus, los compartimientos internos del tren de aterrizaje no se revisan antes de cada vuelo, sino cada dos o tres días, y sólo por personal técnico.
JetBlue no ha ofrecido una declaración contundente sobre qué se hará para que esto no vuelva a ocurrir. El silencio —como el oxígeno en ese tren de aterrizaje— escasea.
🌍 ¿Qué nos dice esto sobre migración y desigualdad?
Este caso no es solo una historia de negligencia aeroportuaria. Es un espejo doloroso de una realidad más profunda: la migración desesperada de jóvenes que prefieren jugarse la vida escondidos entre engranajes de metal que seguir en la tierra que los vio nacer.
¿Qué lleva a un adolescente a decir: «prefiero morir intentando que vivir esperando»? ¿Qué tipo de país expulsa así a sus hijos? ¿Qué continente los espera con indiferencia?
🧳 ¿Quién le da seguimiento a estas tragedias?
Pasaron los titulares. Pasaron las notas en los noticieros. ¿Pero qué ha pasado con la investigación? ¿Se reforzaron los controles en Puerto Plata? ¿Se revisaron cámaras, se depuró el personal de seguridad, se sancionó a alguien?
Nada.
Porque al final, cuando los migrantes mueren de formas espectaculares, se convierten en estadística. Pero cuando sobreviven y prosperan, se les acusa de robar trabajos o invadir fronteras.
🕯️ El legado de Jeik y Elvis: no dejarlos morir dos veces
Hay historias que duelen más porque fueron evitables. Esta es una de ellas. Y lo que más duele es el silencio institucional, el olvido mediático, la falta de consecuencias.
Que sus nombres no desaparezcan. Que no sean dos más en la larga lista de jóvenes que murieron buscando lo que sus países no les dieron.
Jeik Anilus Lusi y Elvis Borquez Castillo murieron intentando volar. Pero su historia exige aterrizar en la conciencia colectiva.