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Max Puig defiende legado de Mauricio Báez y no mueve un dedo en defensa del trabajado

Max Puig defiende legado de Mauricio Báez y no mueve un dedo en defensa del trabajadoPor Esteban Méndez

5 de octubre, 2010

El ministro de trabajo es el principal violador de la libertad sindical en RD

Santo Domingo.-Sin darse cuenta, el ministro de trabajo  Max Puig acaba de contradecirse y meter la pata luego de pronunciarse en contra de una de las políticas que él y otros defienden rajatabla dentro del gobierno dominicano. El hecho ocurrió en un evento en conmemoración del natalicio del gran líder sindical y luchador anti-trujillista Mauricio Báez donde Puig se olvidó por un momento de su cargo y dijo que sin libertad sindical no existe democracia. Su admisión, recogida en una crónica de la página digital 7 dias.com.do, deja al desnudo el doble discurso del estado dominicano hacia la clase trabajadora.

Parece que Puig no se dio cuenta de lo que decía en ese evento. Habló por hablar y quedar bien ante su público pero al final término diciendo una verdad: la libertad sindical no existe en República Dominicana

En junio de este año, Rafael Abreu, presidente de la Confederación Nacional de Unidad Sindical (CNUS),  acusó a Puig de mostrar total indiferencia a la falta de libertad sindical que reina en el país. Según Abreu, Puig está al tanto de cómo los dueños de empresas violan el derecho que tienen los trabajadores de formar sindicatos y luchar por mejorías laborales y salarios justos. Además, Abreu lo acusó de ser responsable del despido de más de 4,000 trabajadores ya que su ministerio no actuó en defensa de la libertad sindical.

En los últimos años miles han sido despedidos de las zonas francas donde los sindicatos son prohibidos.

Pero los trabajadores textiles no son los únicos que sufren persecución.

En la República Dominicana, pertenencia a un gremio no garantiza libertad sindical. En realidad, el derecho a formar y organizar sindicatos solo existe en papel. Este es el caso de enfermeras y doctores que son cancelados de sus puestos y muchas veces agredidos por la policía,  por el solo hecho de manifestar apoyo a huelgas y piquetes.

Según EFE, un reporte de la Organización Internacional de Trabajo (OIT) indica que activistas sindicalescorren peligro físico en Santo Domingo y países de Centroamérica.